Caldo de huesos
El caldo de huesos quizás es uno de los platos tradicionales comunes en muchas cocinas del mundo. Hoy en día se ha perdido el hábito de hacer caldo casero, ya que lleva tiempo y no todos saben hacerlo. Aquí te vamos a explicar paso a paso como hacerlo y porqué vale la pena, ya que tiene muchísimas propiedades.
El caldo de huesos es remineralizante, en la medicina tradicional china se usa para tonificar, especialmente en invierno, es rico en calcio (una de las mejores fuentes de calcio) y también es rico en magnesio (mineral imprescindible para la salud del sistema nervioso), los minerales presentes en el caldo son muy biodisponibles.
Beneficia y apoya el sistema digestivo, al ser rico en colágeno y gelatina ayuda a proteger la barrera intestinal, desinflamar, sellar y reparar la permeabilidad intestinal.
El colágeno y la gelatina son también nutrientes esenciales para el tejido conectivo ayudando a mantener sana la salud del pelo, piel y uñas.
Es beneficioso para el sistema osteoarticular, por su riqueza en glucosamina y condoitrina, su consumo podría ayudar en caso de inflamación y artritis.
Receta:
1kg de huesos (yo uso de pollo ecológico y ternera de pasto), para añadir gelatina recuerda poner las patas del pollo.
1 cebolla
2 puerros
1 tira de alga kombu
2 zanahorias
1 chirivía
2 c.s de vinagre de manzana o de sidra (aumenta la presencia de minerales en el caldo)
2 dientes de ajo pelados
Sal marina
Agua hasta arriba (en mi olla son aproximadamente 3l)
Si utilizas la olla de cocción lenta, slow cooker se programa 20h en lenta y queda un caldo gelatinoso y riquísimo.
Si utilizas la olla normal cocina a fuego lento durante unas 3h, el fuego tiene que ser muy bajo y la olla tapada.
Colar los huesos y las verduras y dejar enfriar el caldo. Al enfriar la capa de grasa queda arriba y se puede eliminar esta capa con la ayuda de una espumadera o cuchara.
El caldo de huesos puede durar unos 5 días en la nevera. Sirve para consomés, para hacer crema de verduras, como fondo para guisos etc….
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